Y después tanto caminar, después de tanto peregrinaje entre libros y geografías, terminamos encontrando la sabiduría del zen, la muleta cristiana, Buda y sus amigos, el Tao, toda la sabiduría que necesitamos para seguir existiendo y mitigar nuestras angustias, en la version digital y pop que da de nuestras vidas el Facebook, que desde luego es invento de un judío asimilado. Salud.