"Un traidor puede más que cien patriotas", la frase es del acervo popular revolucionario argentino. Es una frase dura, que se pliega, pero que está diciendo algo, y cuando uno empieza a pensar que sirve como una simple excusa, su crudo realismo y la resignación que impone reaparecen para volver a coptarte. En otras épocas funcionaba a un nivel práctico. Hoy es una pieza de museo. Su versión digital, "una comentario en contra vale más que cien a favor", da una poco de vergüenza.