sábado, 23 de abril de 2011


“Soneto al agujero del culo” – Verlaine + Rimbaud


Oscuro y fruncido como un clavel violeta
respira, tímidamente oculto bajo el musgo;
el licor del amor todavía lo humedece
y fluye por el leve declive de las nalgas.

Filamentos parecidos a lágrimas de leche
lloran ante el aciago soplo que los arrastra
a través de guijarros de abonos arcillosos
hacia el declive que los reclamaba.

A menudo mi boca se acopla a su ventosa
y allí mi alma, del coito material envidiosa,
cavó su lagrimal feroz, su nido de sollozos.

Es la argolla extasiada y la flauta mimosa,
tubo por donde baja el celestial confite,
Canaan femenino de humedades nacientes.